Miguel Núñez

De a ratos siento una alegría inmensa y me creo dueño del mundo. En otros instantes, el miedo me impide pensar.

¿Quién soy?
Parado frente al espejo, me pregunto simplemente: ¿QUIÉN SOY?

Me asaltan las dudas. Quisiera saber para qué estoy en el mundo. Desearía conocer lo que el futuro me tiene preparado.

No importa que la vida nos haya cambiado y llevado por rumbos diferentes. El pasado no lo podemos desconocer.

escuchas más y hablas menos, entenderás ese mundo extraordinario que llamamos adolescencia y podrás apreciar mejor a ese maravilloso ser humano

. Aprendí a llorar en silencio,

cuando ellos dormían, yo estudiaba.

Fui un adolescente como muchos, pero no tuve a mi padre

La confianza es una inversión, no una compra. Es una inversión de tiempo, energía y recursos que se pueden perder si la persona en quien son invertidas no es de fiar” (Norman Wrigth y Rex Johnson).

A veces quisiéramos amar a seres humanos que permanezcan igual que como los vimos la primera vez. Por eso, a menudo, cuando dejamo

i tus hijos sienten que tú los amas y respetas, incorporarán gradualmente algunas de tus opiniones y valores a sus propias ideas” (Ross Campbell).11