Nosotros nunca hablamos de lo vacías que son nuestras vidas. Y eso es debido a que dedicamos tanto tiempo a llenar nuestras vidas. De todos los actos naturales de los bárbaros, comer y beber, amar, reír, de todas estas cosas nosotros hemos creado un gran ritual y las hemos hecho objeto de culto. Ya nunca tenemos hambre.