Una seductora novela de fantasía y aventuras situada en un país imaginario llamado Zombay. Allí, un chico se escapa de la casa para niños huérfanos en la que vive y se une a una compañía de teatro de duendes para encontrar a su hermano desaparecido. Muy pronto comienza a participar como actor en piezas teatrales. Pero estas obras no son sólo para el entretenimiento, y las máscaras que utilizan los actores son más que una fantasía. Según Mary Quattlebaum, de The Washington Post, «William Alexander construye su primera y atmosférica novela en actos y escenas, en lugar de capítulos, y emplea el elíptico idioma de los viejos cuentos de hadas».