—Mira, a pesar de lo mal que están ya las cosas, aún no hemos tocado fondo. Las hambrunas, las enfermedades, los destrozos de las drogas y el imperio de las mafias no han hecho más que empezar. Todavía hay gobiernos federales, estatales y locales, al menos sobre el papel, y a veces consiguen hacer algo más que recaudar impuestos y mandar al ejército. Y el dinero sigue valiendo. Me asombra eso. Aunque hoy en día necesites muchísimo más para comprar cualquier cosa, todavía se acepta. Eso puede ser una señal de esperanza, o quizá no sea más que otra prueba de lo que he dicho: que aún no hemos tocado fondo.