Alaska sin ti

Lo he encontrado y ahora voy a perderlo de nuevo. Y esta vez, para siempre.

Me rompe el corazón otra vez, quiera o no.

«Antes que nada, café»

No quiero irme así. Quiero morirme como he vivido.

—No, no estaba bien. Se me da bien disimular. No tengo tanta energía como antes.

—. Esas son las historias que la gente necesita recordar. Necesitan esperanza.

—Bastante menos de lo que me dolía antes. Las drogas que me han dado son buenas.

Me golpea una ola de desesperación. ¿Llevaba días sufriendo?

—¿Por qué no dijiste algo…?

—Nah. —Sonríe con resignación y mueve la mano. La pulsera del hospital se desliza por su antebrazo.

ver‍­dad que está bien, pero tam‍­bién es ver‍­dad que eso po‍­dría no ser cier‍­to. Le ha pa‍­sa‍­do algo ate‍­rra‍­dor a una per‍­so‍­na im‍­por‍­tan‍­te para ella y no quie‍­re estar sola.

Pero nos dimos cuenta bastante rápido de que es difícil que las cosas funcionen cuando otra mujer tiene el papel protagonista.

No lo entiendo.

—No tienes que entenderlo. Solo tienes que respetarlo.

Pasar tiempo en su lugar favorito, el cielo, lejos de todo lo que había perdido en la tierra.