es
Knjige
Eva Cantarella

Según natura

¿Contra natura? ¿Según natura? Para los griegos primero y los romanos después las relaciones homosexuales eran una realidad, un componente no despreciable de las costumbres establecidas y la cultura. Partiendo del carácter fáctico de esas relaciones y no de la condición homosexual que es un fenómeno histórico mucho más reciente, Eva Cantarella reconstruye un complejo panorama en el que al análisis de los aspectos jurídicos de esas relaciones se suman los testimonios de la poesía y el mito, los documentos de la vida cotidiana y las reflexiones de historiadores, médicos y filósofos. Más allá de las diferencias sustanciales entre el ritual pedagógico del cortejo griego y el brutal código de conducta romano, que somete en el amor y la guerra, emerge con nitidez la cultura bisexual de ambos pueblos. Bisexual evidentemente desde un punto de vista masculino. La mujer que ama a otras mujeres, excepto en casos excepcionales, aparece en el fondo como una amenaza, como una degeneración, como una viciosa y como una caricatura masculina. A esta tradicional dicotomía entre el papel activo y el papel pasivo, único parámetro ético hasta entonces, pondrá fin el cristianismo, sustituyéndola por la distinción entre heterosexualidad y la homosexualidad hoy vigente. Una obra imprescindible.
475 štampanih stranica
Vlasnik autorskih prava
Bookwire
Prvi put objavljeno
2021
Godina izdavanja
2021
Da li već pročitali? Kakvo je vaše mišljenje?
👍👎

Citati

  • Montserrat Macías Torresje citiraoпре 4 месеца
    Tras Safo, en Grecia el amor entre mujeres deja de ser cantado: ¿y cómo podría ser de otra manera, considerando que las mujeres, al soldarse los vínculos ciudadanos, habían sido relegadas al papel de reproductoras, excluidas de toda forma de educación, y, consecuentemente, de la palabra?
  • Montserrat Macías Torresje citiraoпре 4 месеца
    Otra vez Eros, el que afloja
    los miembros, me atolondra, dulce
    y amargo, irresistible bicho
    escribía Safo[1]. La primera descripción de las penas que el amor inevitablemente comporta, entonces, la debemos a una mujer: más exactamente, a una mujer que amaba a otras mujeres.
  • Montserrat Macías Torresje citiraoпре 4 месеца
    Lo que Platón dice, de hecho, es que cuando un hombre se une a una mujer para procrear, el placer que se deriva de ello es «según natura». Lo que significa, obviamente, que para él no todas las relaciones heterosexuales eran así, sino solo las encaminadas a la procreación. «Contra natura», consecuentemente, eran las relaciones (también heterosexuales) que no tenían ese objetivo.

Na policama za knjige

fb2epub
Prevucite i otpustite datoteke (ne više od 5 odjednom)