«Un día estaba yo pensando que Esparta, siendo como es una de las ciudades de menor población, sin embargo se ha convertido en la ciudad más poderosa y más célebre de Grecia… y me extrañaba de que así fuera. Luego pensé en las instituciones de los espartanos, e inmediatamente dejé de extrañarme». Con estas palabras expresaba su admiración por Esparta el escritor ateniense Jenofonte. Esparta como modelo forma parte del mito de la ciudad, pero también forma parte de dicho mito la imagen opuesta: el estatalismo, belicismo, inhumanidad e incultura de los espartanos. En estas páginas se pretende una aproximación a la realidad histórica de Esparta, con sus luces y sus sombras, frente al esplendor contemporáneo de Atenas, su gran rival. Ernst Baltrusch es profesor de historia antigua en la Universidad Libre de Berlín. Sus especialidades son el Derecho de gentes en la Grecia antigua y la historia de los judíos en la antigüedad.