Y si la serpiente aumenta su monstruosidad y su corrupción, si emponzoña la mismísima tierra de Elfhame, entonces reinaré entre monstruos. Gobernaré sobre esta tierra ennegrecida con mi padre, el gorro rojo, como marioneta. Me temerán y ya nunca volveré a tener miedo.
«Solo de su sangre derramada emergerá un regente digno de tal nombre».