La edad dorada

No puedo soportar el pensamiento de que alguno de nuestros creyentes de edad decline en influencia y eficiencia. El Señor desea que usted coopere con él haciendo todo lo que pueda de usted. Si se une voluntariamente con él en esta obra, sus últimos días serán sus días más brillantes y mejores.

El verdadero ministro de Cristo debería mejorar continuamente. El sol de la tarde de su vida debe ser más sazonado y productor de fruto que el sol de la mañana. Debe continuar aumentando en tamaño y brillo hasta su ocaso detrás de las montañas occidentales.

El Señor desea que sus siervos que han encanecido defendiendo la verdad permanezcan firmes y leales, y que den su testimonio en favor de la ley.

Espero que ninguno de los que han estado por tanto tiempo en la obra piensen que porque están envejeciendo, están incapacitados para el servicio. Espero que se levanten para llevar su mensaje tan pronto tengan la evidencia de que el Señor los está ayudando

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