100 preguntas sobre el amor

el amor del bueno no duele

Cuando nos enamoramos locamente, nuestro cerebro se inunda de dopamina, serotonina, adrenalina y oxitocina, que son los ingredientes con los que se cocina el amor y el placer.

Una retirada a tiempo es una victoria.

Me habría gustado aprender sobre el arte de amar sin tener que sufrir. Pero me tocó pasarlo mal, como a todo el mundo.

Así, cuando los hombres son infieles en sus relaciones heterosexuales, se están aprovechando de los privilegios que les confiere el patriarcado: tú te quedas en casa fregando, yo me voy de fiesta con otras. Tú no follas con nadie más; yo, con todas las que quiero.

Pero también hay hombres honestos que son capaces de hablar con su pareja sobre lo que les está ocurriendo. Así, le dan la oportunidad a su compañera de tener la información que necesita para tomar sus propias decisiones al respecto con total libertad. Si tienen una relación hermosa y profunda, pueden evaluar unidos si quieren seguir juntos, si quieren abrir o cerrar la relación o si prefieren terminarla.

La gran mayoría de los hombres educados en el patriarcado creen que tienen derecho a engañar a sus esposas para que no puedan tener relaciones con nadie, mientras ellos tienen todas las que quieren.

En definitiva, la honestidad y la comunicación asertiva es fundamental para causar el menor daño posible a tus parejas.

La honestidad con las parejas no es fácil, pero aún es peor mentir y engañar a quien quieres. Y todavía peor es darte el lujo de tener las relaciones que deseas mientras le impides a tu pareja hacer lo mismo. En el momento en que tú haces lo que quieres y no permites que tu pareja lo haga también, estás maltratando a tu pareja y estás ejerciendo violencia emocional sobre ella.

de los grandes miedos que nos impiden decirle a nuestra pareja lo que nos está ocurriendo son: el miedo a hacerle daño, por un lado, y, por otro, el miedo a que termine la relación.