cualquier caso, no creo que yo sea la persona indicada —y aunque lo creyera, me lo callaría— para predecir con exactitud los resultados a largo plazo de cualquier cambio, que a mi entender hay que ir descubriendo sobre la marcha. Eso sí, el principio fundamental que me gustaría comunicar a la gente es que es preciso demostrar la legitimidad de toda forma de autoridad, dominio o jerarquía, de toda estructura autoritaria: ninguna está justificada de antemano