Stalin, como secretario general del PCUS, les sancionó: Trotski y Zinóviev fueron expulsados del Politburó y Kámenev perdió su condición de candidato para éste. A finales de 1927, los tres fueron expulsados del partido. En 1928, Zinóviev y Kámenev fueron readmitidos, después de retractarse públicamente y de solicitarlo, pero Trotski, que se negó a hacerlo, fue deportado en 1929. Stalin estaba a un paso de la victoria final.