La Enfermedad Y Sus Metáforas. El Sida Y Sus Metáforas

Alius tumenti aqualiculo mortem parturit

Da la impresión de que las sociedades tuvieran necesidad de alguna enfermedad para identificar con el mal, que culpe a sus «víctimas», pero es difícil obsesionarse con más de una.

Me convencí de que las metáforas y los mitos matan.

Desde luego, no es posible pensar sin metáforas. Pero eso no significa que no existan metáforas de las que mejor es abstenerse o tratar de apartarse.

Aristóteles (en Poética, 1457b): «La metáfora consiste en dar a una cosa el nombre de otra».

La enfermedad nace del desequilibrio. La finalidad del tratamiento es restaurar el equilibrio justo, lo que en términos políticos sería la justa jerarquía

A lo largo del siglo XIX las metáforas patológicas se hacen más virulentas, descabelladas, demagógicas. Y cada vez más se tiende a usar la palabra «enfermiza» para cualquier situación con la que no se esté de acuerdo.

las metáforas modernas sugieren que hay un profundo desequilibrio entre individuo y sociedad, la sociedad concebida como antagonista del individuo.

Las metáforas patológicas siempre han servido para reforzar los cargos que se le hacen a la sociedad por su corrupción o injusticia.

En nuestros tiempos de una economía que impone la superproductividad destructiva y en que pesan cada vez más sobre el individuo las restricciones burocráticas, cunde el miedo de poseer demasiada energía y la angustia de que se le impida manifestarse