Autocriticarse es algo que sólo sirve para intensificar la indecisión y la holgazanería. La orientación que hay que dar a la energía mental es la de liberarse de lo viejo y crear modelos mentales nuevos. Dígase: «Estoy dispuesto a renunciar a la necesidad de no ser digno. Soy digno de lo mejor que hay en la vida, y con amor me permito aceptarlo». «A medida que pase unos días repitiendo esta afirmación, el efecto externo que es la indecisión empezará, automáticamente a desaparecer». «A medida que me cree interiormente un modelo que reconozca mi propio valor, ya no tendré necesidad de negar mis buenas condiciones».