Mis tiendas y mis toldos, novela de Luisa Josefina Hernández, reitera la intensidad narrativa y el estilo ya característico en sus relatos, emplea un lenguaje sencillo pero vasto en tonos y matices -cómico y realista-. Los personajes conducirán al lector por innumerables recovecos de la casa Castelo, entre un ajuar desmejorado y una relación familiar agrietada, como muchas, pero que paradójicamente no se empeña por ocultarlo.