Evocación de un pasado remoto, entrelazamiento de voces y de recuerdos, fantasmas que frecuentan los pasillos de las viejas casas porteñas, amores frustrados, secretos inconfesables de familia, todo como si de una gran partitura se tratara. Ritmo y melodía de un lenguaje en deuda con la vocación musical del autor. Esta novela es el punto final de una obra lúdica y alucinada que desde siempre fue un misterio para el público y un reto para la crítica.