Este es un libro militante. Las reflexiones y los destinos de las mujeres que aquí se presentan no evocan ni la pasividad ni el conformismo con una sociedad que las pone en un segundo plano. Todo lo contrario.
Este libro retrata las historias de veintitrés mujeres de América Latina que interpelan el mundo e incitan a los miembros de sus comunidades a la acción a favor del bien común. Y al liderar ese proceso, ríen, lloran y se emocionan al compartir sus esfuerzos en una lucha que de antemano saben que será eterna.
Ellas son caciques wichis, maestras de escuelas, promotoras de la soberanía alimentaria, abogadas especialistas en género, defensoras ambientales, madres que buscan a sus hijas desaparecidas, defensoras de las mujeres encarceladas, creadoras de bibliotecas, educadoras en oficios, empresarias sociales, activistas feministas.
Todas representan una decisión de vida marcada por el deseo de transformar el mundo y de sobreponerse a los obstáculos que encuentran. Ellas no se resignan; ellas están dispuestas a tomar el control de sus propias vidas y hacer avanzar a sus comunidades. Sin embargo, ellas, como tantas otras cientos de miles, son invisibles para las mayorías. Por eso este libro cuenta sus historias de lucha. El compromiso con sus comunidades ilumina.