Cargan también sin saberlo con los primeros brotes de sarampión que terminará por derrotarlos
Nunca se sabe cuándo un lector acunará en sus brazos un buen libro, de repente lo abres, deslizas la mirada línea por línea y te descubre completamente sumergido en la historia, esto me paso con esta novela, la definición de Goodreads no desmerece, es, en efecto, "Una deslumbrante novela sobre las huellas que dejamos, las huellas que borramos y las huellas que buscamos reconstruir".
Primero, decir que despues de leer "Para que no me olvides" de Marcela Serrano, el tema de la afasia me había tocado profundamente, y sin quererlo, me lo vuelvo a encontrar, pero ahora, este monstro llega a la vida de la escritora inglesa Aliza Abravanel, escritora que acaba de sumar una tetralogía a mi colección de "Libros que siempre querré leer, pero no podré porque son ficticios", los títulos son: "La frontera invisible", "Corrientes marinas", "Meteorología comparada" y "Los estratos" (última obra no publicada).
En esta novela hay tres pérdidas y tres búsquedas en batalla con la afasia, la primera y más dura, terminar su libro, la segunda y muy cruel, es la de un último hablante indígena que se confronta con el desvanecimiento de su cultura y su idioma mientras un antropólogo lucha por evitarlo, y, por si eso no fuera suficiente, la del narrador, Julio, un profesor de letras sin ilusión que, tras ser designado albacea literario de su amiga Aliza, viaja hasta la colonia de artistas donde esta pasó sus últimos días y logra, mediante la lectura de su manuscrito póstumo, ajustar cuentas con su pasado.
El duelo por la pérdida solamente se puede dimensionar por el doliente, Austral es una historia de duelo, sí, pero también la historia de un retorno, y en esa vuelta, está llena de valor, porque hace falta mucha valentía para negarse a ceder al arrollador y violento paso de la modernidad y sus barbaries. De las tierras arrasadas guatemaltecas hasta la alta Amazonía peruana, pasando por Nueva Germania, la comuna antisemita fundada en Paraguay por la hermana de Nietzsche, Austral propone un largo viaje hacia el sur en su intento por excavar los orígenes de la xenofobia contemporánea. Lo que borramos, siempre lo intentaremos reconstruir, eso sin duda, pero borrar ya es suficiente tragedia, hagamos de la reconstrucción algo más.