Ignacio Gómez Calvo

En el fantástico documental El siglo del yo de Adam Curtis se recoge con precisión cuál fue el verdadero triunfo del neoliberalismo fielmente representado en el thatcherismo. No tanto o no tan solo la imposición de un proyecto económico al servicio de las élites, sino lograr imponer un nuevo proyecto de identidad, de vida, donde a través del sentimiento de diferencia y autorrealización surgido de las ruinas del sesentayochismo y los brotes de la posmodernidad, las personas renegaran de su naturaleza de clase y abrazaran un supuesto liberador ultraindividualismo.

Mientras le caían gotas de jugo por la barbilla, pensé en que Dios existe en pequeños detalles que no siempre vemos, a menos que casualmente estemos mirando en el preciso instante en que una hermana planta cara a sus demonios y te recuerda que aún quedan paraísos en el mundo

—A veces pienso que el universo es solo un resplandor. El resplandor de un cigarrillo en la oscuridad. Todas las estrellas, los planetas, las galaxias, los confines infinitos… Todo está en la puntita resplandeciente de un cigarrillo en la mano de un hombre apoyado en una pared, que mira pasar a una chica camino de su casa sabiendo que ella nunca llegará adonde va.