sí, su sangre brillaba… ¿pero saben qué es lo peor? Que olía a moras frescas… como a mermelada… les juro que me dieron ganas de lamerla… sé que suena a locura, pero me entraron unas ganas incontrolables de comerme toda esa sangre.
Montserrat Montes de Ocaje citiraoпре 2 године
—Creo que el chisme es pecado, doña Lidia —dijo Virginia —y si no, debería serlo.
Montserrat Montes de Ocaje citiraoпре 2 године
los humanos no somos más que marionetas, obligados a convivir en un planeta despiadado y vengativo