José Ángel Buesa

  • Moira Marquezje citiraoпрошле године
    III

    Acaso nos veremos un día, casualmente, al cruzar una calle, y nos saludaremos.

    Yo pensaré, quizás: “Qué linda es, todavía”. Tú, quizás pensarás: “Se está poniendo viejo”.

    Tú irás sola, o con otro. Yo iré solo, o con otra. O tu irás con un hijo que debiera ser nuestro.

    IV

    Y seguirá muriendo la vida, año tras año, igual que un río oscuro que corre hacia el silencio.

    Un amigo, algún día, me dirá que te ha visto, o una canción de entonces me traerá tu recuerdo.

    Y en estas noches tristes de quietud y de estrellas, pensaré en ti un instante; pero cada vez menos...

    V

    Y pasará la vida. Yo seguiré soñando, pero ya no habrá un nombre de mujer en mi sueño.

    Ya yo te habré olvidado definitivamente, y sobre mis rodillas retozarán mis nietos.

    (Y quizás, para entonces, al cruzar una calle, nos vimos frente a frente, ya sin reconocernos).

    VI

    Y una tarde de sol me cubrirán de tierra, las manos, para siempre, cruzadas sobre el pecho.

    Tú, con los ojos tristes y los cabellos blancos, te pasarás las horas bostezando y tejiendo.

    Y cada primavera renacerán las rosas, aunque ya tú estés vieja, y aunque yo me haya muerto
  • nahiaraoyarzo2005je citiraoпрошле године
    solo es grande en la vida quien sabe ser pequeño.
  • Mildred Osirisje citiralaпре 3 месеца
    Te digo adiós y acaso te quiero todavía. Quizás no he de olvidarte, pero te digo adiós. No sé si me quisiste... No sé si te quería...
  • Mildred Osirisje citiralaпре 3 месеца
    Me queda tu sonrisa dormida en el recuerdo, y el corazón me dice que no te olvidaré; pero, al quedarme solo, sabiendo que te pierdo, tal vez empiece a amarte como jamás te amé.
  • Brxje citiraoпре 2 године
    XII-XIII) y, a continuación, de la lírica amorosa renacentista de la mano de Dante y Petrarca que se consolide el canon occidental que fija el sitio privilegiado de la mujer en la poesía amatoria y de los correspondientes modelos de expresión que tal predominio exige, consolidados por el “doloroso sentir” de Garcilaso en la poesía española. El Romanticismo, heredero de la tradición acumulada de la poesía amatoria y alimentado por la tendencia a la exaltación de las emociones por encima del intelecto, dejará una indeleble huella del amor sublimado y del atormentado desamor, reflejado en una retórica apasionada y excesiva, las más de las veces acogido a una expresión irracional del sentimiento; una manera prolongada en las ubicuas tentaciones del neorromanticismo,
  • David Taverasje citiraoпрошле године
    poesía sentimental, en particular la amorosa, ha gozado de una excelente salud desde los orígenes mismos de la literatura. No solo en Occidente, sino en el lejano Oriente, donde desde fechas tempranas la mujer preside el canto y el lloro del amor, acudiendo a la expresión elíptica, la alusión y a las fórmulas convencionales que la tradición exige. La Antigüedad grecolatina, por el contrario, acude a una expresión abierta, como en Safo, y que, en los versos de Catulo y Ovidio se desata en el vértigo de la pasión gozosa y sufriente. Pero no será hasta el surgimiento, primero, de la cansó amorosa y cortés trovadoresca (ss. XII-XIII) y, a continuación, de la lírica amorosa renacentista de la mano de Dante y Petrarca que se consolide el canon occidental que fija el sitio privilegiado de la mujer en la poesía amatoria y de los correspondientes modelos de expresión que tal predominio exige, consolidados por el “doloroso sentir” de Garcilaso en la poesía española. El Romanticismo, heredero de la tradición acumulada de la poesía amatoria y alimentado por la tendencia a la exaltación de las emociones por encima del intelecto, dejará una indeleble huella del amor sublimado y del atormentado desamor, reflejado en una retórica apasionada y excesiva, las más de las veces acogido a una expresión irracional del sentimiento; una manera prolongada en las ubicuas tentaciones del neorromanticismo, interrumpido únicamente por una moderidad de reacción antisentimental, que incorpora la ironía y el humor, despojando el lenguaje de los previos sutiles ropajes que lo envolvían, dotándolo de un tratamiento directo, conversacional a veces, prosaico y provocador. José Ángel Buesa (Cuba, 1910-República Dominicana, 1982) fue un poeta neorromántico. Desconoció voluntariamente
  • Moira Marquezje citiraoпрошле године
    Yo te amaré en silencio, como algo inaccesible, como un sueño que nunca lograré realizar, y el lejano perfume de mi amor imposible rozará tus cabellos... y jamás lo sabrás.
  • Moira Marquezje citiraoпрошле године
    solo es grande en la vida quien sabe ser pequeño.
  • Moira Marquezje citiraoпрошле године
    La vida será tuya, será tuya si sabes que es ajena, que es igual ser montaña que ser grano de arena, pues la calma del justo vence al furor del bravo.
  • Moira Marquezje citiraoпрошле године
    Este domingo triste pienso en ti dulcemente y mi vieja mentira de olvido, ya no miente.

    La soledad, a veces, es el peor castigo...

    Pero, ¡qué alegre todo, si estuvieras conmigo!
fb2epub
Prevucite i otpustite datoteke (ne više od 5 odjednom)