Todos los ruidos del mundo

Siento vibrar tu voz
en todos los ruidos del mundo.

Siento vibrar tu voz
en todos los ruidos del mundo.
OVIDIO

—¿Nunca has escuchado eso de que el poeta es una máscara y por su boca habla alguien más? —insistió y yo me acordé de una de esas frases que en algún momento de mi vida habían tenido mucho sentido:

—¿Por su boca hablará mi espíritu?

—¡Exacto! —exclamó, y yo me reí aún más.

Siento vibrar tu voz
en todos los ruidos del mundo.

—No es un secreto que te amo. No es un secreto que te amo. No es un secreto que te amo.
Y su risa.
Su risa.

Ella presiona el botón que regresa la cinta y luego el que hace que suenen las voces: No es un secreto que te amo. Manu sonríe y ella también. Es bueno. Siempre es bueno que uno sonría. No es un secreto que te amo.

Un hombre que compraba flores para ella, flores blancas que apestaban la casa. Que no evitaba hablar de los casos de divorcio por temor a darle ideas. Alguien a quien no le importaba que Aurora leyera en voz alta cuando no podía dormir y lo despertara una y otra vez para leerle alguna cita en voz alta.