Nuestras psiquis naturalmente buscan una liberación de la presión interna causada por la represión de aspectos no reconocidos de nosotros mismos. Es por eso que nos obsesionan las malas noticias, los malos comportamientos y en especial las historias mediáticas que muestran la caída de personas que están en su mejor momento. Cada vez que escuchamos una de esas historias repletas de codicia, lujuria, perversión, estupidez, fraude o traición, inconscientemente obtenemos algo de alivio interno y liberación de la presión de nuestro propio lado oscuro.