bookmate game
es
Gabriel García Márquez

Todos los cuentos

Obavesti me kada knjiga bude dodata
Da biste čitali ovu knjigu otpremite EPUB ili FB2 datoteku na Bookmate. Kako da otpremim knjigu?
  • Carolina Coloradoje citiraoпре 5 година
    Y dijo: «No sientes el frío». Y yo le dije: «A veces». Y ella me dijo: «Debes sentirlo ahora». Y entonces comprendí por qué no había podido estar solo en el asiento. Era el frío lo que me daba la certeza de mi soledad. «Ahora lo siento», dije.
  • Yei De Ávilaje citiraoпре 5 година
    Se sintió intangible, inespacial, inexistente.
  • Diana C.je citiralaпре 6 година
    Le costaba creer que el tiempo hubiera podido hacer semejantes estragos no sólo en su vida sino también en el mundo.
  • island269je citiraoпре 4 године
    «Eres el único hombre que, al despertar, no recuerda nada de lo que ha soñado».
  • Carolina Coloradoje citiraoпре 4 године
    Yo soy la que llega a tus sueños todas las noches y te dice esto: Ojos de perro azul
  • Ivan Millanje citiraoпре 4 године
    En las madrugadas anteriores se había resistido a penetrar en ese mundo oscuro, nebuloso, hacia donde lo estaban empujando con una fuerza incontenible todas las potencias de su vida. Había sabido resistir. Aún tenía vigor para apretar en su puño la lucidez que se sacudía, que se rebelaba tratando de fugarse por entre sus dedos
  • Ivan Millanje citiraoпре 4 године
    Y lo que más la intranquilizaba era que ese miedo no tuviera justificación alguna, que fuera un miedo único, sin razón; un miedo porque sí
  • Ivan Millanje citiraoпре 4 године
    En esas noches, con los redondos ojos abiertos y asombrados, soportaba el peso de la oscuridad que caía sobre sus sienes como un plomo derretido.
  • Ivan Millanje citiraoпре 4 године
    Siempre su pensamiento, después de vagar por los oscuros rincones de la casa, se encontraba frente a frente con el miedo.
  • Carolina Coloradoje citiraoпре 5 година
    —Te quiero tanto que no me acostaría contigo —dijo. Luego caminó hacia donde ella estaba. Se quedó mirándola de frente, los poderosos brazos apoyados en el mostrador, delante de ella, mirándola a los ojos. Dijo—: Te quiero tanto que todas las tardes mataría al hombre que se va contigo.
fb2epub
Prevucite i otpustite datoteke (ne više od 5 odjednom)