El libro que el lector tiene en sus manos es de la autoría de Massimo La Torre, profesor italiano, nacido en Mesina en el seno de una familia de juristas. Su padre ejerció la abogacía y sirvió en la resistencia italiana contra el fascismo. Fue educado dentro de la tradición humanística –en un Liceo Classico— que incluyó el estudio del griego y del latín así como una sólida formación literaria. Cursó tanto la Licenciatura en Derecho como la Licenciatura en Ciencia Política en su Mesina natal. De esta época destaca el magisterio recibido de los profesores Rodolfo Di Stefano y Vincenzo Tomeo. Después de ejercer ante los tribunales y trabajar en el Archivo Estatal de Bolonia, se doctoró en el Instituto Universitario Europeo de Florencia con una tesis sobre Karl Larenz y la doctrina jurídica nacionalsocialista alemana bajo la supervisión de Gunther Teubner. Su itinerario profesional e intelectual lo ha llevado por un número considerable de centros de estudio universitarios: Graz, Edimburgo, Carlos III de Madrid, Münster, Estrasburgo, Lisboa, Hull, Catanzaro, entre otros. Desde mi punto de vista, el ambiente jurídico en el que estuvo inmerso durante su infancia así como la educación humanística recibida marcaron fuertemente su sensibilidad, su carácter. Ambos hechos, pienso también, son fundamentales para comprender su trabajo y pueden encontrarse reminiscencias claras de ello a lo largo de estas páginas.