Comprender nuestra mente

la persona amada dice algo que te hiere, intenta practicar esto: cierra los ojos, inspira y espira conscientemente y visualízate a ti y a esa persona dentro de cien años. Después de tres respiraciones, cuando abras los ojos de nuevo, ya no te sentirás herido

Mirar a todos los seres con los ojos de la compasión». Cuando miramos los árboles, las rocas, las nubes, el cielo, los seres humanos y los animales con los ojos del amor, sabemos que la comprensión ya está presente. La comprensión es el fruto de la mirada profunda, de arrojar la luz de la atención sobre todas las cosas. Comprensión, amor, compasión: son la misma cosa.

Cuando observamos profundamente la naturaleza de interdependencia y vemos que esa persona que nos está causando daño es también una víctima (de su familia, de su sociedad, de su entorno), la comprensión brota de forma natural. Si hay comprensión, hay empatía y reconciliación. La comprensión siempre conduce al amor. Si tenemos comprensión y amor, nuestra ira se desvanece y no sufrimos más. Lo que nos hace sufrir es nuestro miedo, ansiedad, pena, y desesperación. La habilidad para ver la naturaleza interdependiente de todas las cosas nos hace tener un corazón más compasivo y nos preserva del sufrimiento, incluso cuando nos traicionan y nos hacen daño. Si somos capaces de amar a los demás a pesar de sus malas acciones, somos realmente un bodhisattva.