Las plantas ornamentales, principalmente los árboles urbanos como el Ficus spp., son elementos fundamentales en el paisaje de una ciudad, los cuales brindan diversos beneficios de orden ambiental, estético, paisajístico, recreativo, social y económico. En la ciudad de La Paz, Baja California Sur, México, destacan principalmente dos especies: Ficus benjamina y Ficus microcarpa. Ambas se utilizan para embellecer cualquier área verde de la zona, junto con palmeras y neem. Pero, en los últimos años, estos árboles han presentado un daño severo por la presencia de un hongo de coloración oscura y consistencia carbonosa, que se establece bajo la corteza del mismo y ocasiona que el árbol se marchite provocando que paulatinamente pierda las hojas de las ramas y, finalmente, muera. Su infección inicia a través de heridas y los daños más severos se dan en árboles que carecen de cuidados culturales y presentan algún tipo de estrés. El principal método de control implementado por la sociedad sudcaliforniana son las podas severas, sin embargo, esto aumenta el proceso de infección del hongo, debido a que el árbol se estresa fuertemente y se vuelve más susceptible al patógeno. Además, provoca grandes heridas que sirven como puerta de entrada a las nuevas esporas que se diseminan por el viento a otras áreas o tejidos.
En este contexto, la Dra. Mirella Romero Bastidas, especialista y responsable del área de Fitopatología de la Universidad Autónoma de Baja California Sur, presenta en Identificación e incidencia del agente causal de la muerte de ramas en árboles. Ficus benjamina en La Paz, Baja California Sur y su control in vitro mediante fungicidas sintéticos un trabajo de investigación realizado con el propósito de establecer la determinación e incidencia del agente causal de la muerte de ramas en árboles de Ficus benjamina, así como un bioensayo con el fin de evaluar cuatro diferentestipos de fungicidas sintéticos para la inhibición micelial del patógeno aislado.
