"El Príncipe Feliz" es un cuento corto escrito por Oscar Wilde, publicado por primera vez en 1888. Esta conmovedora historia combina elementos de la fábula y el cuento de hadas para transmitir un mensaje profundo sobre la compasión, el sacrificio y la belleza interior.
La trama gira en torno a una estatua cubierta de oro que representa a un príncipe joven y feliz. Después de su muerte, su espíritu queda atrapado en la estatua y puede ver la tristeza y la pobreza que afligen a su ciudad. A través de los ojos de una golondrina, que se queda a vivir bajo su estatua, el príncipe aprende sobre las dificultades de los menos afortunados.
Movido por compasión, el príncipe persuade a la golondrina para que distribuya sus joyas y el oro de su estatua entre los pobres. Cada noche, la golondrina despoja la estatua del oro y de sus gemas preciosas para ayudar a los necesitados. Este acto de generosidad, aunque despoja a la estatua de su belleza exterior, revela la verdadera belleza del alma del príncipe.
La historia concluye con un final agridulce que toca el corazón del lector, resaltando la importancia de la empatía y la caridad por encima del materialismo y la vanidad. La prosa poética de Wilde y su habilidad para capturar la esencia de los temas universales como el amor, la compasión y el sacrificio hacen de "El Príncipe Feliz" un cuento atemporal que continúa resonando con los lectores hasta el día de hoy.
