Algunas culturas, desde la Grecia homérica al Afganistán contemporáneo, han codificado el recuento de hilos en canciones y cantos. En la Odisea, Circe y Calipso cantan mientras tejen; escuchando su canto, Polites sabe que Circe está ante su telar incluso antes de verla, lo que sugiere que esas canciones las conocía todo el mundo en aquella época. Según escribió un viajero europeo, las tejedoras de alfombras de Asia Central del siglo xix cantaban «en un extraño sonsonete el número de puntos y el color con que debían llenar los nuevos motivos».
En Afganistán, las